En la vida hay momentos buenos y momentos malos, momentos de felicidad y de tristeza, de alegría y de dolor, en definitiva momentos que merecen la pena vivirlos y otros que mejor que nunca hubiesen ocurrido.
Pero la vida es así, si lo piensas es cómo una montaña rusa llena de altibajos, a veces subes y estás arriba dónde todo te sale bien y estás feliz. Pero de repente bajas y sientes como te ahogas, y luego vuelven los momentos de estabilidad.
Y si es así la vida que nos a tocado vivir, pero ¿sabes lo que tenemos que hacer?
Pues cuándo estemos en la subida y estemos en lo más alto, dónde la felicidad inunda tu alma, cuándo estas sonriendo y viviendo momentos felices, es ahí cuándo más tienes que disfrutar porque aunque parezcan escasos no lo son. El problema es que solemos dramatizar más los momentos malos y parece que nos guste disfrutar de ellos porque nos empeñamos en alargarlos y No eso no lo tenemos que hacer.
Simplemente hay que disfrutar de cada pequeño detalle, cada palabra, cada gesto que te haga feliz, que te saque una sonrisa y así seremos más felices. Y en los momentos en los que estemos mal, nos acordaremos de que somos capaces de encontrar la felicidad en el más pequeño detalle y hacer esto es saborear la vida día a día.
Por lo que no te tienes que rendir eso nunca.. porque dicen que la vida son dos días y uno está nublado. Pues no te preocupes porque la gente que te quiere y a la que le importas, en esos días nublados llevara un paraguas para librarte de la tempestad.
Para una personita muy pequeña pero a la vez GIGANTE que lo necesita :)