Algunos días el corazón debería ser más prescindible, algo que te puedes sacar del pecho y guardar en un cajón. Lamentablemente, esos días igual que el resto, lo necesitamos. Dependemos de un ritmo cardiaco que no para, que es constante, y que nos punza a cada latido. Somos todo corazón, y quien pretenda arrancárselo morirá en el intento. No somos máquinas, somos personas... cúmulos de sentimientos contradictorios que un día nos hacen felices y al siguiente tiran a matar. No podemos quitarnos el corazón y permanecer inertes hasta que cesen los vendavales. Al contrario, no nos queda otra que tomar aire y sentir. Sentir para bien y para mal.
Sentir, latir, al fin y al cabo vivir.
La vida está llena de decisiones que debemos tomar, pero no podemos dejar que nadie las tome por nosotros ya que tu y únicamente tu, eres el dueño de tu vida, de tu destino y de tus sueños. Así que lucha por lo que quieres, vive hasta el último segundo de tu vida, disfruta de cada momento cómo si fuese el último, sonríe y haz realidad tus sueños porque no sabes lo que el destino tendrá preparado para ti y al fin y al cabo la vida es algo efímero.
miércoles, 26 de septiembre de 2012
viernes, 21 de septiembre de 2012
viernes, 14 de septiembre de 2012
Caprichoso destino
Que paradójico llega a ser el destino, hace un año no sabía lo que sentía por ti y tampoco porque me quedaba paralizada cada vez que algo iba más allá entre nosotros. Puede que el destino sea caprichoso y haya querido jugar conmigo porque ahora se lo que siento, porque lo que surgió veranos atrás no ha desaparecido y una vez más has seguido ahí... en tu línea. La única diferencia es que esta vez no me he dejado llevar por el miedo sino todo lo contrario he puesto las cartas sobre la mesa; gracias a eso en nuestras memorias siempre habrá una maravillosa noche de verano pero también gracias a eso me he dado cuenta de que no siempre conoces a las personas. Solemos creer que sabemos como van a reaccionar las personas de nuestro alrededor, pero una vez más nos equivocamos.
martes, 24 de abril de 2012
Hay un adjetivo para cada ocasión
Creo que me resultaría mucho más fácil resolver todos los enigmas del mundo que llegar a comprender esta extraña situación entre tu y yo.
Pero también puede que esa situación no exista y que sea mi cabeza, o pensándolo mejor mi corazón, el que quiera que así sea. A pesar de que sea raro, inquietante, intrigante, a ratos gratificante y dolorosa en otros muchos; me gusta creer que cuando dos miradas se cruzan dicen mucho más que si dos bocas hablasen. Y es que me gusta sentir esa tensión o energía extraña que hay cuándo estas cerca de mí.
Hay quién puede pensar que soy ilusa, masoquista, inocente, demasiado soñadora, negativa, realista, cabezota, optimista...y puede que así sea, me gusta poner un adjetivo a cada día y a cada situación.
Sin embargo sigo sin saber que adjetivo encaja en esta situación.
martes, 14 de febrero de 2012
¿Que es enamorarse de verdad?
Significa amar sin condicion , sin restriccion, entregandolo todo. Enamorarse significa pensar en esa persona y que salga una sonrisa enorme en tu rostro. Enamorarse es luchar. Significa sentir esas mariposas en el estómago cuando está cerca y con solo rozar tu piel. Significa amar hasta rabiar. Significa que puede pasar el tiempo que esa persona es la que ocupa plenamente tu corazón. Enamorarse es sentirse en una nube, pero también, es dolor. Dolor de no tener a esa persona. Dolor de sentir un vacío en el corazón. Dolor de luchar y no obtener nada. Dolor, que solo una persona puede curar. Esa persona es por la que das tu vida luchando. Es una persona irreemplazable. Es quien llena ese vacío. Es, en definitiva, el amor de tu vida.
Las personas
Las personas, ahora, camuflan lo que sienten. Regalan sonrisas y marcan las miradas. Seleccionan los momentos con una fecha. Dejan las historias sin final. Olvidan lo que sienten antes de que les de tiempo a saberlo. Ahora, se dice "te quiero" como quien dice "hola". Los besos se regalan, y los calentones en cualquier parque a cualquier hora de la tarde son rutina. Si eso les llena...vale, pero eso no es para mi. Porque, cuando digo te quiero, es porque te quiero, de verdad, sin contratos, sin papeles, sin interés, y con todas las consecuencias que conlleva hacerlo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)